Un pequeño ser humanoide con el número 9 grabado en su espalda, se encuentra con un mundo post-apocalíptico en el que rápidamente descubre que no está solo, al toparse con otro ser similar a él pero con diferente número en la espalda.Este descubrimiento le llevará a dar con el resto de los habitantes de este planeta hostil y peligroso, en el que máquinas hambrientas de cualquier forma de vida arrasan la superficie día y noche.
Juntos desencadenarán una serie de acontecimientos que les llevarán a entender todo lo sucedido en un pasado terrible y no muy lejano en el tiempo.
Veredicto del Sobaco: creo que las películas de animación son el género perfecto para quienes tienen la imaginación necesaria para crear historias que sólo puedan contarse a través de un universo virtual. Tim Burton, uno de los productores de esta película, es uno de ellos. Se trata de artistas que cuentan historias fantásticas utilizando el lenguaje cinematográfico como vehículo. De otra manera, estas películas no serían posibles. Es decir, utilizan la tecnología para contar una historia, y no al revés. Número 9 no es un simple despliegue de efectos. Esta película tiene una historia detrás, una historia que invita a la reflexión, como todas las buenas historias.
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