13 de agosto de 2008

En Agosto es gratis

Aparqué, de puta madre, por cierto, porque yo no sé aparcar de otra manera, y me dirigí hacia el parquímetro para que me atracaran por-primera-vez-chispas.
Tenía la duda de si por las tardes del mes de Agosto el servicio de vampiros funcionaba. Bueno, yo no tenía la duda. Yo, para no variar, pululaba ignorante por esta vida. Menos mal que ella, siempre ella, la más mejor del mundo, me comentó que, tal vez el servicio de chupópteros no funcionara durante las tardes de Agosto.

Una vez más, tenía razón.
Ahí estaba la pegatina.
Mes de Agosto, de 9 á 15.
Podíamos dedicarnos a curiosear por las tiendas de Chinatown sin tener que salir cada media hora a pagar el impuesto revolucionario.
Aún estábamos contemplando el cartelito cuando, de repente, como los ninjas de las películas, se acerca un chino por la parte posterior del parquímetro y, señalándolo, dice... "es gratis".

Eso es sabiduría, coño.
Aprenden las palabras justas y sólo utilizan las necesarias.
Podría haber dicho "debido a las vacaciones estivales, los controladores de parquímetros no trabajan las tardes del mes de Agosto, así que pueden ustedes estacionar sin tener que sacar el ticket correspondiente".
O sea, lo que cualquier españolito medio hubiera dicho en la misma situación.
(Pausa para risas).

El cháinis, no.
El cháinis dijo "es gratis".
Y no se refería a que fuera gratis siempre, no.
Era gratis en ese momento.
Aparcar era gratis, no había que sacar ticket.
El simple gesto de señalar el parquímetro y la frase que iba de la mano lo resumían todo.
No me extraña que vayan a dominar el mundo dentro de cuatro días.
Es que son sabios, coño.

No hay comentarios: