5 de junio de 2008

Hoy me ronda por la cabeza...

Aparte de para practicar agujeros en los calcetines de diverso tamaño y condición social, ¿qué utilidad real tienen las uñas de los pies?
El bazo, las muelas del juicio, el apéndice, los pezones masculinos, los lóbulos de las orejas, los pelos de la espalda... en el fondo, si uno piensa un poco, el cuerpo humano no es tan sabio.
Hay un montón de cosas inútiles repartidas por todo el cuerpo.
Incluso algunas que estorban sólo en determinados momentos, como los brazos a la hora de dormir.
¿O soy el único que no sabe dónde colocarlos para que no se le duerman?
Deberíamos ser como Míster Potato, para poder desprendernos de las piezas que nos sobran o que no usamos.

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