Vértigo

Continuando con el ciclo de pelis de Hitchcock que iniciamos hace unas semanas con La ventana indiscreta, le tocó el turno el pasado fin de semana a la también genial Vértigo.
James Stewart es un ex detective que sufre de miedo a las alturas después de una persecución por los tejados en la que estuvo a punto de caer a la calle. Intenta hacerse el súper macho subiéndose a un taburete para demostrar, ante la rubia de turno, que ya está curado pero, al tercer escalón se derrumba como un servidor cuando contempla, con los ojos como un teleñeco, el borrador de la Renta de este año.

Un amiguete de Jimmy le encarga que siga a su mujer, interpretada por Kim Novak (debería decir perpetrada, que se ajusta más a la realidad), porque últimamente se comporta de una manera extraña, creyendo ser otra persona.
El comportamiento de la mujer y el miedo de Jimmy a las alturas juegan un papel determinante en esta maravilla del suspense.

Veredicto del Sobaco: una nueva muestra del inmenso talento de Hitchcock. Película absolutamente redonda, en la que no queda ningún cabo suelto y todas las preguntas que te pueden surgir se resuelven de manera natural en el devenir de la trama. Lo más inquietante de la peli, sin duda, las enormes cejas de Kim Novak, que tiene de rubia lo que yo y que me recordaron a las de Groucho Marx. Cosas de la moda, las cejas, digo.